miércoles, 31 de diciembre de 2008

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Es este el tiempo de los esfuerzos, en el que uno finalmente cae, en eso. Ahora, el esfuerzo por volver al asiento familiar, que mantendré momentáneo siempre.

El sur del calendario llega esta vez como todos, buscando.
Hemos aprendido a hacernos la sorpresa, explosiones planificadas. Los muñecos son siempre distinguibles, los hechos para ser vendidos y los que se hacen con todo el amor para ser quemados.

De años no tengo idea, esta última semana, he celebrado el fin y vuelto a comenzar unas tres veces. La mentira me encanta, pero para el romance. Es mejor no convidar los futuros, ni compartirlos porque, finalmente, cada quien sabe a qué saben sus uvas.
En mis lecturas de fin de año hay de todo, las que hablan de los sucesos ocurridos tipo diario, las que se proponen tipo agenda y las que agradecen.
Pensé en un collage y salió esto:


Como diario ..

El año que se despide no se quiere ir y los anteriores tampoco: el embrujo isleño y el país de los tulipanes, que me acogieron estos dos últimos todavía se recuerdan bien. Un suspiro para mi Floreana, otro para San Cristóbal y el Hospital en el que hice sutura a un borracho la mañana del primer día del 2008, después de una noche entera de bailar cumbia, otro para mis galapagueños , que extrañe tanto hoy, mientras en Guayaquil ningún cajero paga estos días, en Puerto Baquerizo pueden sacar al gerente de la roca volcánica.

Lo que espero..

Del año que viene: el regreso al viejo continente que me produce una estresperanza.


De este día, sí que sí, este miércoles 31 espero mucho:
De mí: que me alcance a depilar, que mi vestido me siga gustando, que no me de alergia, que no se me corra el maquillaje hasta la una, que el cerquillo permanezca recto y salir bien en las fotos, videos y todo lo que vaya a ser facebook y hi5 de mis amigos.
De mi gente: que no falte ni un solo chiste de los que ya nos hemos reído mil veces, que pongan radio Cristal, aunque no esté Armando Romero, que pueda esconderme cuando las vecinas se acerquen al dar el abrazo, que se acuerden de las camaretas, que alguien llore para poder reírme y que me llamen de las Europas, de la Capital, de las Islas Encantadas y de la Garzota.


Diciendo gracias..


A mi padre por el boleto de regreso, a mi madre por entrar aquí a leer, a mi hermana por cortarse el pelo, ser menor y vivir en otro país, al de Zaragoza por los 4 DVD de música nueva que me dejó antes de partir, a quien teniendo uno estos, me dio un título y un blog, se rechaza aún de mentor o cualquier cosa que se le parezca.

Y el más grande para los amigos de ISRAEL, que hicieron desaparecer todo vestigio de despecho romántico, para darnos una buena razón para el alcohol, seguro no la desperdiciaremos con mi mejor amiga.


Para quienes leen este intento terapéutico secretamente, pedazo de letras Carlos Drummond de Andrade , que es más de lo que pedí :


Quem teve a idéia de cortar o tempo em fatias,a que se deu o nome de ano,foi um indivíduo genial.Industrializou a esperança, fazendo-a funcionar no limite da exaustão.Doze meses dão para qualquer ser humano se cansar e entregar os pontos. entra o milagre da renovação e tudo começa outra vez, com outro número eoutra vontade de acreditar que daqui pra diante vai ser diferente.
Por si acaso, un intento de traducción:

Quien tuvo la idea de reducir el tiempo en rodajas,
a que se ha dado el nombre año,
fue una persona brillante,
Industrializó la esperanza, haciéndole con que funcione dentro de los límites del agotamiento.
Doce meses son suficientes para proporcionar cansancio a cualquier ser humano y dar los puntos.
A continuación, se introduce el milagro de la renovación y todo empieza de nuevo,con otro número y otra voluntad para creer que a partir de ahora hacia adelante será “diferente".



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