Hemos salido de nuestra vivienda rumbo a buscar que hacer, esta ciudad la llenamos los estudiantes, de lejos vemos a unas chicas que van en un estado muy "amigable" ya que nos interrogan ¿Son de Venezuela o Argentina?, ellas vienen de una fiesta en la Facultad de Econòmicas y nosotros buscamos una noche màs larga.
Estàn tocando jazz en alguna plaza, vamos en busca de los cigarrillos, los camel light que han subido su apuesta, sobre todo porque tenemos calificado de "racista" al bartender del ùnico bar en que los encontramos, aùn no hemos definido bien cual es la discriminaciòn; si contra los latinos, contra los borrachos o contra los latinos escandalosos despilfarradores y borrachos.
Sentados en un pequeño parque pensamos que puede ser el momento de volver con los cigarros y encerrarnos , pensamiento asesinado en la escena pornogràfica que inmediatamente protagonizamos en el antiguo mostrador de una vinoteca debido a la proporciòn de cuatro botellas en dos cabezas, luego comienzo a coquetear con el mesero Pakistanì estudiante de medicina y con el enòlogo que nos hace cambiar a los vinos jòvenes hasta que mi acompañante, presa de algùn demonio que no son celos, decide frenarme con una frase ¡ Pidamos cuatro botellas para llevar que nos vamos al concierto Amanda!
Algunas veces se nos hace difìcil conectarnos en este mundo, en mis carnes y en otras pocas que nos negamos a falsos difrutes he vivido aquello,cuando nos juntamos esta sed disfrute toma dimensiones imposibles de saciar hasta para estas sociedades en las que puedes "experimentar mucho" ¡Bah! Esto no deja de seguir siendo teòrico.
Sòlo muy pocos son capaces de meter la flecha en el lugar exacto y crear en segundos la alegrìa de algo jamàs vivido, un paseo de mil mares al otro lado del mundo, una celebraciòn que hemos estado esperando por años, o toda la vida. Algo que se recuerda sòlo en el cuerpo.
Kusturica es el salvador, el sanador de la cualquier invàlidez, el precursor de un engranaje que aunque parezca invisible es màs real que cualquier recuerdo. Que gusto el poder haberlo visto en acciòn, asi tal cual underground.
Es este el primer capìtulo de una noche de esas mortales.
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