jueves, 7 de mayo de 2009

Esmeraldas



Una mirada de cebra partida con siluetas de gigantes.
Se abren gargantas de abismos verdes.
En el centro fuego que prende el mar,
prende el viento, prende el cielo hambriento siempre oscuro, prende en sed, prende en hambre, prende en grito, en muerte y miedo.
Es un lugar, es mi país, soy yo.



Entra el carretero claveteado de palmeras en hileras sin fin. El camino es una espesa bruma verde que aplasta. Un inmenso candil es la guía que refina petróleo.
Llegamos al parque y parece que estoy ciega, camino una cuadra y parece que no escucho, ha pasado una hora y estoy muda.

El universo de nostalgia de no haber vivido ahí, una interminable soledad de no haber nacido con la noche, de no tener esa mirada fuerte, de no desconfiar es lo que no me deja dar un paso. Voy sola preguntando poco, me quedo en mi propio terreno, camino lo justo, la mujer desconocida a mi costado me ordena ir al baño y beber algo; sin protestar accedo, luego me ordena buscar otro bus, lleva ella mi mismo destino.

Salgo de la ciudad que no se alcanza a contar en un suspiro.

Para Muisne. Diga!


La vida que parece querer conversar. Y uno que intenta responder, en ellos, en gente, en motivos...


En esta parte de la tierra la historia se cayó.


6 comentarios:

  1. Negra has dado casi en el clavo, justo casi en el centro. Noto que nuestros escenarios se abren como una herida a cada paso, chorreando sangre y suspiro colorido que aflora en cada nuevo camino. Tu Esmeraldas, yo Portoviejo, el quien sabe donde.

    Gieco, maestro, su acordeon suena mejor que una cabala en un viernes festivo...

    Salud por las horas invertidas yendo y viniendo de aqui para alla y viceversa.

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  2. "...nostalgia de no haber vivido ahí..."

    Nada mejor que eso, describe lo que siento cuando estoy en esa tierra, luchando por seguir aún verde.

    Disfruta del momento en ese lugar. Talvez tengas que marchar. Talvez solo te quede el consuelo de ir a saborear esos pasteles por breves momentos. La nostalgia se entremezclará con la melancolía y se remojará en la frustración. No dejes que se te escapen las memorias de ese lugar tan especial: Esmeraldas, un lugar donde, por fortuna, por desgracia, el tiempo pasa demasiado lento.

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  3. Morriña de lugares que nunca he visitado, nostalgia de la huella que dejó tu pisada, saudade de vidas que no viviré... mágico atardecer de luna menguante. Salve.

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  4. Negra,
    Si el gusto es nuestro. El èpìgrafe esta vez lo escribí yo misma, no cabía más.

    Y las horas, pierdo la cuenta y nol as siento como la espalda, los sueldos dilapidados en placer, la vida el trabajo y una profesión. Que bueno que estas, que bueno que estamos.

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  5. JS, colega, un poco la nostalgia. Esmeraldas es cierto el tiempo no pasa y talvez hace falta un internista, talvez en algunos años regrese. Por ahora alguna idea para clinical trials, bien clínico eso si, DM, HTA.
    Gracias por la visita.

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